Masajes Deportivos
El masaje deportivo va encaminado a mantener en
perfectas condiciones las funciones fisiológicas del aparato locomotor. Puede
darse antes, durante y después del esfuerzo, con objetivos diferentes según
cada uno de estos tres casos:
Antes del
esfuerzo
Se da el
masaje una vez el deportista haya hecho su calentamiento, y pocos minutos antes
de que comience la prueba. Objetivos:
- Potenciar el calentamiento.
- Estimular el sistema nervioso.
- Retrasar la aparición de fatiga.
Durante el
esfuerzo
Los
objetivos que se persiguen son los siguientes:
- Relajar la musculatura parcialmente.
- Eliminar sustancias de deshecho.
- Producir un nuevo estímulo neuromuscular.
Después del
esfuerzo
Después del
esfuerzo: suele se más largo que los anteriores y se aplica con más intensidad
sobre los músculos trabajados. Objetivos:
- Eliminar sustancias de deshecho.
- Neutralizar la acidez muscular.
- Relajar y descongestionar los músculos trabajados.
Masaje
deportivo a nivel terapéutico se muestra
muy útil en los siguientes casos:
- Edemas.
- Contusiones, tras 48 horas.
- Roturas tras la cicatrización.
- Tendinitis.
- Esquinces, tras 48 horas
Lesión de Rodilla
• Esguince: uno o varios ligamentos han sufrido un estiramiento excesivo debido a un retorcimiento o una tracción; es posible que el ligamento esté desgarrado o roto.
• Distensión: un tendón o un músculo han sufrido un estiramiento excesivo.
• Daño en el cartílago de la rodilla: el cartílago es un disco con forma de media luna llamado menisco y actúa como "amortiguador" de la rodilla.
• Desgaste por uso excesivo: suele aparecer en las personas practican el ejercicio de correr.
Lesiones de los ligamentos de la rodilla
Los ligamentos conectan los huesos entre sí. Los ligamentos exteriores de la
rodilla, llamados "ligamento lateral interno " y "ligamento
lateral externo", son los que aportan estabilidad a la rodilla y limitan
los movimientos laterales.
• El ligamento lateral interno se encuentra en la cara interna de la rodilla y se tensa al estirar la pierna. Es un ligamento fuerte, pero puede sufrir un esguince o romperse por completo (desgarrarse) si se retuerce la pierna cuando está estirada y, al mismo tiempo, recibe un golpe lateral, como ocurre durante los placajes jugando al rugby o cuando en el fútbol el pie queda fijo en el suelo y la rodilla gira.
• El ligamento lateral interno se encuentra en la cara interna de la rodilla y se tensa al estirar la pierna. Es un ligamento fuerte, pero puede sufrir un esguince o romperse por completo (desgarrarse) si se retuerce la pierna cuando está estirada y, al mismo tiempo, recibe un golpe lateral, como ocurre durante los placajes jugando al rugby o cuando en el fútbol el pie queda fijo en el suelo y la rodilla gira.
• El ligamento lateral externo es parecido a un cordón fino y fuerte que se encuentra en la cara exterior de la rodilla y conecta la parte inferior del fémur con la parte superior del peroné (uno de los huesos de la parte inferior de la pierna). Son raras las lesiones de este ligamento por sí solo, pero puede ser necesario repararlo si se tienen dañados otros ligamentos.
Las lesiones de los ligamentos laterales interno y externo pueden clasificarse del modo siguiente:
• Grado 1: esguince sin desgarro del ligamento.
• Grado 2: desgarro parcial del ligamento.
• Grado 3: desgarro total del ligamento.
Los ligamentos interiores de la rodilla se llaman "ligamento cruzado anterior" y "ligamento cruzado posterior". "Cruzado" significa en forma de cruz: el ligamento cruzado anterior cruza por delante del ligamento cruzado posterior. Estos ligamentos aportan estabilidad a la rodilla cuando ésta adopta distintas posiciones, en especial en los movimientos hacia adelante y hacia atrás de la articulación de la rodilla.
Otras lesiones de los tejidos blandos
Los demás tejidos blandos que rodean la rodilla también pueden lesionarse. Por "tejido blando" se entiende cualquier tejido del cuerpo, distinto del hueso.
Si se practica un deporte que conlleva retorcer el muslo mientras se tiene el pie apoyado en el suelo, el cartílago de la rodilla puede sufrir un desgarro. Con la edad, el cartílago se desgasta (se degenera) progresivamente, por lo que es más fácil que se desgarre incluso con una lesión muy leve.
El uso excesivo de la rodilla también puede causar el desgarro del tendón rotuliano, que es el que conecta la rótula con el cuádriceps.
Síntomas de las lesiones de rodilla
Los síntomas de la mayoría de las lesiones
de los ligamentos son similares, independientemente de cuál sea el ligamento
dañado. Entre otros, pueden observarse los siguientes:
• Dolor
• Hinchazón
• Inestabilidad: puede notar que la rodilla cede o que se queda bloqueada.
Al producirse la lesión, podría tener la sensación de que se ha producido un estallido o un chasquido, incluso puede oír un chasquido. Asimismo, es posible que no pueda sostenerse bien sobre la pierna afectada ni apoyar todo su peso sobre ella.
Si se lesiona el cartílago de la rodilla, no notará ningún dolor directo, pero puede que la hinchazón que seguirá a la lesión sí le provoque algo de dolor o molestias. El dolor puede manifestarse tanto en el interior como en el exterior de la articulación de la rodilla (dependiendo de la zona de la rodilla en la que se encuentre el cartílago dañado) y es posible que observe cierta hinchazón.
Si observa alguno de estos síntomas, consulte con su médico de cabecera, un fisioterapeuta o un traumatólogo.
• Dolor
• Hinchazón
• Inestabilidad: puede notar que la rodilla cede o que se queda bloqueada.
Al producirse la lesión, podría tener la sensación de que se ha producido un estallido o un chasquido, incluso puede oír un chasquido. Asimismo, es posible que no pueda sostenerse bien sobre la pierna afectada ni apoyar todo su peso sobre ella.
Si se lesiona el cartílago de la rodilla, no notará ningún dolor directo, pero puede que la hinchazón que seguirá a la lesión sí le provoque algo de dolor o molestias. El dolor puede manifestarse tanto en el interior como en el exterior de la articulación de la rodilla (dependiendo de la zona de la rodilla en la que se encuentre el cartílago dañado) y es posible que observe cierta hinchazón.
Si observa alguno de estos síntomas, consulte con su médico de cabecera, un fisioterapeuta o un traumatólogo.
Causas de las lesiones de rodilla
• Si la rodilla recibe un golpe o se mueve más allá de su rango de movimiento
habitual, por ejemplo, a raíz de una caída o un mal apoyo.
• Si se practica un deporte que combina carrera, saltos y paradas con cambios bruscos de dirección, como el fútbol.
• Si se sufre un trastorno como artrosis (osteoartritis) o gota, o se padece sobrepeso.
• Si la rodilla sufre un golpe contra el salpicadero del coche en un accidente de tráfico.
• Si se practica un deporte que combina carrera, saltos y paradas con cambios bruscos de dirección, como el fútbol.
• Si se sufre un trastorno como artrosis (osteoartritis) o gota, o se padece sobrepeso.
• Si la rodilla sufre un golpe contra el salpicadero del coche en un accidente de tráfico.
Diagnóstico de las lesiones de rodilla
El médico de cabecera, el fisioterapeuta o el traumatólogo le preguntará por
los síntomas que presenta y le examinará. Es posible que palpen por encima de
la rótula con suavidad, sobre todo si la rodilla no está muy inflamada, para
detectar la presencia de líquido en la articulación. El médico de cabecera o el
fisioterapeuta le pedirá que describa cómo se hizo la lesión, dónde le duele y
qué tipo de dolor siente.
El médico también puede realizar pruebas para saber si están lesionados los ligamentos o los tejidos blandos de la rodilla. Para ello, le pedirá que se tumbe o se siente y le doblará y flexionará la rodilla. También le colocará la pierna en diferentes posiciones. Es posible que puedan pedirle que realice movimientos como subir o bajar escaleras, ponerse en cuclillas o saltar a la pata coja.
El médico en algunos casos puede derivarle a un hospital para que le practiquen otras pruebas, por ejemplo, una RM (resonancia magnética) o una ecografía, y, en algunos casos, una radiografía. Estas pruebas pueden ayudar a diagnosticar lesiones más complicadas o graves.
El médico también puede realizar pruebas para saber si están lesionados los ligamentos o los tejidos blandos de la rodilla. Para ello, le pedirá que se tumbe o se siente y le doblará y flexionará la rodilla. También le colocará la pierna en diferentes posiciones. Es posible que puedan pedirle que realice movimientos como subir o bajar escaleras, ponerse en cuclillas o saltar a la pata coja.
El médico en algunos casos puede derivarle a un hospital para que le practiquen otras pruebas, por ejemplo, una RM (resonancia magnética) o una ecografía, y, en algunos casos, una radiografía. Estas pruebas pueden ayudar a diagnosticar lesiones más complicadas o graves.
Tratamiento de las lesiones de rodilla
El tratamiento que recibirá dependerá de la lesión y la gravedad de la misma.
Autotratamiento
Para tratar cualquier tipo de lesión de los tejidos blandos de la rodilla, debe seguir el procedimiento PRICE ( siglas en ingles), cuyas letras corresponden a lo siguiente:
• Protección. Proteja la lesión para que no sufra más daños.
• Reposo. Deje reposar la rodilla lesionada durante los dos o tres primeros días. Transcurrido este tiempo, reanude los movimientos para no perder demasiada fuerza muscular.
• Hielo (Ice, en inglés). Aplique una compresa fría, por ejemplo hielo o una bolsa de guisantes congelados envueltos en una toalla, para reducir la hinchazón y los hematomas. No aplique el hielo directamente sobre la piel, ya que podría provocarle heridas.
• Compresión. Comprima la articulación vendándola para un mejor apoyo de la zona lesionada y para reducir la hinchazón.
• Elevación. Eleve la rodilla, apoyándola a una altura superior a la del corazón.
Autotratamiento
Para tratar cualquier tipo de lesión de los tejidos blandos de la rodilla, debe seguir el procedimiento PRICE ( siglas en ingles), cuyas letras corresponden a lo siguiente:
• Protección. Proteja la lesión para que no sufra más daños.
• Reposo. Deje reposar la rodilla lesionada durante los dos o tres primeros días. Transcurrido este tiempo, reanude los movimientos para no perder demasiada fuerza muscular.
• Hielo (Ice, en inglés). Aplique una compresa fría, por ejemplo hielo o una bolsa de guisantes congelados envueltos en una toalla, para reducir la hinchazón y los hematomas. No aplique el hielo directamente sobre la piel, ya que podría provocarle heridas.
• Compresión. Comprima la articulación vendándola para un mejor apoyo de la zona lesionada y para reducir la hinchazón.
• Elevación. Eleve la rodilla, apoyándola a una altura superior a la del corazón.
Para que duerma tu bebe
Si las nanas no funcionan, pruebe con
un masaje
Antes de dormir, unos minutos de
masaje pueden ayudar al bebé a conciliar el sueño y a los padres a dormir
durante más horas seguidas. Hasta ahora se conocían los beneficios de los
masajes infantiles como relajantes, antidepresivos, e incluso para aumentar la
interacción materno-infantil. Ahora, por primera vez, se señala que pueden
incluso regular el ritmo circadiano del neonato, facilitando la conciliación
del sueño.
Un grupo de científicos de la
Universidad de Haifa, ha sido el primero en cuantificar los efectos
de los masajes nocturnos en bebés midiendo la producción de melatonina, una
hormona reguladora del sueño que se segrega durante las horas nocturnas. El
sistema circadiano, el reloj biológico por el que el ser humano se ajusta a los
ciclos de 'día-noche', es el encargado de controlar la secreción de melatonina.
Según explican estos investigadores,
los masajes antes de la hora de dormir pueden servir al bebé como un potente
identificador de tiempo, de manera que les permite coordinar más fácilmente su
propio sistema circardiano con las señales
ambientales que le rodean.
Veinte madres con bebés recién nacidos (entre
10 y 14 días de vida) participaron en este estudio, publicado en el 'Journal of
Developmental and Behavioral Pediatrics'. Al cabo de las seis-ocho semanas de
terapia, se empleó un sensor para evaluar los niveles de actividad diurna y
nocturna de los bebés. Sólo la mitad de las madres masajeó al bebé antes de
acostarlo y fueron precisamente estos niños los que se mostraron más inactivos
durante las horas nocturnas, además, sus ritmos de actividad diurna-nocturna se
alinearon con los de sus madres. Por el contrario, los niños que no habían
recibido masajes estuvieron más despiertos durante la noche.
El ensayo también midió los niveles de
melatonina, y se pudo comprobar cómo estos aumentaban durante la noche entre
los niños del grupo de masaje. Las conclusiones añaden que es posible que las
propias madres modificasen su actitud hacia el bebé a consecuencia de los
masajes y de los cambios de los ritmos de sueño del niño.
El masaje infantil es una antigua tradición en
muchas culturas del mundo, y se basa en la filosofía que asegura que el tacto
logra crear una mayor interacción entre la madre y el niño. Para llegar a este
grado de conexión la madre debe masajear suavemente la espalda y el vientre del
bebé trazando pequeños círculos. Además, se puede extender el masaje a las
extremidades, con suaves movimientos en verticales, como si se estuviese
'ordeñando'.
Acupuntura
La acupuntura puede ayudar a combatir la
alergia al polen y aliviar sus síntomas, según revela un estudio de científicos
alemanes difundido por la clínica universitaria de la Charité de Berlín. El
equipo, coordinado por el profesor Stephan Willich y el docente Benno
Brinkhaus, del Instituto de Medicina Social, Epidemiología y Economía de la
Salud de la Charité de Berlín, presentó sus conclusiones, coincidiendo con la
etapa previa a la temporada de alergias.
En el experimento han participado más de
5.000 personas que presentaban los síntomas típicos de la alergia primaveral,
tales como secreción nasal abundante, escozor de ojos y dificultades
respiratorias. La conclusión es que, a través de la acupuntura, las molestias
derivadas de la alergia pueden aliviarse hasta un 80 por ciento, lo que
supondría un aumento evidente de la calidad de vida de los pacientes. "Nos
ha impresionado especialmente que (la acupuntura) tenga los mismos resultados
en la alergia al polen que en las enfermedades crónicas", declaró el
profesor Willich.
La acupuntura, una ciencia ancestral
derivada de la medicina tradicional china, está cada vez más extendida y la
Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda su uso para tratar hasta 40
enfermedades, una de ellas la alergia primaveral, recuerdan los científicos.
La intención del equipo es seguir
investigando, para averiguar si verdaderamente las agujas que se emplean en
acupuntura son realmente las responsables de que mejoren los pacientes, o si
por el contrario la causa es la estrecha relación entre el médico y el paciente
durante la terapia.
Masajes Mecánicos
La Hernia Discal (Como mejorar - no curar)
La hernia discal se genera tras la ruptura
del núcleo del disco intervertebral. En muchos casos viene precedido por una
protusión del disco, esto es, un desplazamiento del mismo sin rotura del
núcleo.
Las causas principales para la aparición de una hernia de disco son las siguientes:
Las causas principales para la aparición de una hernia de disco son las siguientes:
Por la degeneración y el envejecimiento articular prematuro.
Por accidentes que generaran micro o macro traumatismos.
Debido a esfuerzos grandes o repetitivos en el tiempo, sobre la columna vertebral.
Por sobrepeso al incrementar la curvatura
lumbar y la presión sobre los discos vertebrales.
Por atrofia o pérdida de tonicidad de los músculos que mantienen la posición vertebral.
El disco intervertebral, que separa dos
vértebras adyacentes, es de naturaleza cartilaginosa, con un recubrimiento duro
exterior y un centro similar a gelatina.
Cuando el borde exterior se deteriora por
desgaste, o se rompe por presión, la materia interior del disco sale al
exterior y puede presionar sobre una raíz nerviosa que sale de la médula
espinal. El pinzamiento del nervio se manifiesta en una serie de síntomas
característicos que se describen más adelante.
Síntomas
La persona experimenta una sensación de pinzamiento doloroso localizado, que se puede irradiar hacia las extremidades.
Su movilidad se reduce gradualmente o de forma inmediata.
Puede haber pérdida de sensibilidad y hormigueo en la zona afectada y en las extremidades, bien superior o inferiores dependiendo de dónde esté localizada la hernia.
Suele darse con más frecuencia entre las últimas vértebras, tanto entre las lumbares como en las cervicales.
Cómo mejorar -Tratamiento osteopático
Si la profusión o hernia conlleva un fuerte
desplazamiento del disco, puede estrangular la raiz nerviosa o presionar
fuertemente hacia la médula y hacer inevitable, en los casos muy severos, la
intervención quirúrgica. Pero aún en estos casos, las técnicas osteopáticas
pueden ayudar para preparar la zona antes de la intervención, eliminando las
contracturas musculares de la zona lumbar, con lo que el cirujano tendrá un
acceso más cómodo al disco herniado, y la recuperación post-operatoria será
también más rápida y completa.
En el resto de los casos y, sobre todo en
aquellos donde hay poca o ninguna alteración de la geometría del disco
intervertebral, la terapia manual puede conseguir una recuperación
sobresaliente, al trabajar positivamente sobre la causa que los produjo y
devolver la mecanica alterada de nuevo a su equilibrio. Un profesional
altamente cualificado puede realizar una manipulación de estas características
pero, como se ha comentado e insistimos nuevamente, sólo en aquellos casos
favorables.
El tratamiento osteopático, en cualquiera de los casos, dirige su acción
para conseguir la disminución del dolor y la mejora de la movilidad perdida,
gracias a la aplicación de técnicas especificas sobre los tejidos afectados.
Permite la recuperación gradual y la mejora parcial o total de los síntomas y,
como hemos visto en algunos casos, de sus causas.
Ejemplo de tratamiento de hernia discal
lumbar
Un paciente aquejado de hernia discal lumbar llega a la consulta del osteópata con una postura forzada (antiálgica) para evitar el dolor. A la palpación se observa una contractura muscular en toda la zona lumbar y hacia el glúteo, así como la falta de movilidad de la zona. Esto último se observa porque, en primer lugar, al moverse le duele al paciente y, en segundo lugar, porque al llevar un cierto tiempo sin moverse, se produce una cierta atrofia muscular en la zona.
Se realiza primeramente un tratamiento
manual para descontracturar la zona (inhibición del tejido blando), a través de
las capas fasciales y musculares, y con suaves y precisos movimientos sobre las
zonas articulares, siempre y cuando lo permita su cuerpo. Se pretende quitar el
espasmo muscular y ayudar a crear más espacio en la zona para que respire la
hernia, fluya la circulación interna, se oxigene y regeneren los tejidos y que,
en definitiva, se descomprima la parte nerviosa afectada.
Este tratamiento puede ir potenciado con técnicas de terapia cráneo-sacral, para inhibir el mecanismo de defensa del cuerpo, ayudándole en el sentido que él necesita. El resultado principal es eliminar las contracturas musculares ocasionadas por el pinzamiento del nervio ciático y, por lo tanto, devolver la movilidad natural a la espalda baja.
Tras el tratamiento, el afectado podría
mantener la estabilidad de la posición correcta de la zona afectada y prevenir
un desequilibrio de nuevo en la zona a través de ejercicios específicos de
Pilates. Prevenir posturas forzadas y mantener el equilibrio en todo el
conjunto osteo-muscular, con especial hincapié en la correcta posición de la
estructura pélvica y alineamiento vertebral.
Es recomendable una revisión periódica por parte de un osteópata, que verificará la correcta disposición de la estructura haciendo hincapié en posición de la columna, corrigiendo los posibles desequilibrios que se hayan producido desde la última revisión.
ENLACE RECOMENDADO: http://www.espalda.org/index.asp
Suscribirse a:
Entradas (Atom)